Hablo de él. Hablo de cambiar a
Stendhal por su nombre en el síndrome, de cómo alguien se convierte en motivo,
acción y la fusión de ambos, de como el minutero tiembla cada vez que da un
paso si él no está cerca, de cómo conjugar su sonrisa en gerundio y decir
"no" cruzando los dedos. Hablo de joder al velocímetro de su pecho,
de revolucionar los horarios y olvidar el sueño por los sueños, de hacer el
amor y que el amor nos haga estar así, de vivir
entre puntos suspensivos y olvidar los de sutura..
Hablo de él.
Hablo de él.
No hay comentarios:
Publicar un comentario